Las 3 reglas de oro del diseño de interiores

A la hora de emprender el proyecto de diseño de interiores de una casa, es imprescindible que pienses en tu propio estilo de vida antes de definir cómo habitamos nuestro hogar con nuestras posesiones a nuestro alrededor.

Para dar con él, hay una serie de preguntas que deberás hacerte para averiguar con qué estilo quieres diseñar el interior de tu hogar, que girarán alrededor de las 3 reglas principales del diseño: ubicación, estilo y los detalles.

La ubicación, un factor a tener muy en cuenta en el estilo decorativo

La ubicación va a ser determinante en nuestro estilo de vida, en el espacio y distribución de nuestro hogar, y en las necesidades de nuestra unidad familiar. Así que el lugar donde vivimos es, por tanto, el punto de partida en todo proyecto de diseño de interiores.

¿Es una casa en la playa o en la montaña? ¿Un loft en el centro, o en un barrio más apartado del bullicio de la ciudad? A todas estas preguntas puede que hallemos la respuesta en muy diversos lugares: en una población costera, junto a un lago, en una casa adosada, en un piso antiguo o moderno…

El estilo que nos identifica, la pregunta del millón en decoración

Una vez considerado el tema de la ubicación, podremos pasar a cuestiones más íntimas y personales en la proyección personal que queremos dar al hogar: el diseño de interiores y decoración, la disposición y presentación.

¿Con qué estilo decorativo me siento identificado o identificada? ¿cuál es el que me hace sentir más a gusto? ¿estilo inglés o francés? ¿me identifico más con un estilo moderno o contemporáneo, o simplemente con una mezcla de los dos?

Hay infinitos estilos para infinitas formas de vida, pero una visión ordenada del estilo nos ayudará a lograr un interior en armonía y con orden visual.

En este sentido, el periodo y estilo de las estancias puede variar, pero hay algunas pautas que definen “el buen gusto” que supera las diferencias nacionales, regionales y culturales. De esta manera podemos encontrar el mismo espíritu en un apartamento de Manhattan, que en el fresco interior de una casa de Marrakech.

Detalles y toques finales, imprescindibles para el mejor de los resultados

Los últimos retoques pueden hacer que la estética general de un espacio sea más convincente, y éstos pertenecen a la última fase del diseño, la de la disposición y presentación.

El diseño de interiores defiende que la efectividad de un esquema decorativo puede aumentarse con solo añadir objetos, cuadros y adornos dispuestos como complementos del mobiliario y demás elementos decorativos frente a un fondo.

Pero en la práctica existen muchos factores a tener en cuenta por un diseñador, como: el tratamiento de los espacios de transición (esos lugares un poco difíciles como el vestíbulo, rellano, escaleras…) o el tratamiento del color de la estancia, de los materiales, de la luz…

“La clave está en los detalles” es una máxima que contiene más verdad en la decoración de interiores que en ningún ámbito de la vida.

Crear espacios funcionales, emotivos y estéticos siguiendo un buen diseño de interiores no es una tarea sencilla, y requiere de formación y experiencia.

 

Recurrir a un profesional del interiorismo es la mejor opción para conseguir un resultado óptimo y que nuestro hogar transmita una conexión emocional. En Manuel Lamarca somos mucho más que una tienda de decoración, y te ayudaremos a diseñar un espacio sin igual en el que convivan variedad de piezas, colores y tapizados en perfecta armonía si te animas a visitarnos.